Deshaciendo las polaridades

Cuantas más polaridades experimentamos más alejados estamos de nuestra naturaleza interior, más alejados estamos de la comprensión del Amor.

Cuando hablo de polaridades hago referencia a las dos caras de la dualidad, y se manifiesta cuando por ejemplo tengo mucho rechazo hacia algo, o todo lo contrario, su polaridad sería cuando admiro mucho algo.

En el ámbito de la economía, por ejemplo si considero las dos caras de la dualidad, experimentamos la polaridad cuando le doy mucha importancia a tener mucho dinero, o sintiéndome muy desgraciado si apenas lo tengo.

Si nos vamos a la relación de pareja, ahí es un área donde se experimenta mucha polaridad, muchos picos de placer, sobre todo cuando acabas de conocer a alguien y nos sentimos lo que llamamos “enamorados”, y nuestro sentir está totalmente condicionado por lo que me ofrece el otro, tiene la capacidad de elevarme al cielo, y de bajarme al infierno cuando surge algo que “me mueve”, todo esto que experimentamos en la relación es deseo, deseo de ser especial para ti y de que tú lo eres para mi, y está muy lejos de ser amor, aunque tengamos la creencia de que eso es amor, en realidad el amor no difiere de lo que siento por mi pareja que de lo que siento por otro.

 

El amor De Dios es un amor que incluye todo, no es un amor selectivo. Que bonito es poder compartir con una pareja donde no hay polaridad, vivir la relación donde el propósito es deshacer las polaridades, y reconocerme, a través de ti, viendo donde todavía me mueven cosas, con el propósito de sanar lo que está en mi, esto es una relación auténtica, y su propósito es deshacer la polaridad.

Continuamente estamos sufriendo las polaridades porque estamos dándole más importancia a las circunstancias del mundo y dejando que tengan un poder en nosotros, llevándonos a sentimientos de dolor, tristeza, culpa, rabia y y al otro extremo de la polaridad, excesivos picos de alegría, estados de placer, pero un placer que viene de la importancia que le doy a las cosas que experimento en el mundo, y cuanto más importancia le doy, más experimentaré las distintas polaridades, tendré un pico de placer pero a continuación tendré un pico de dolor, porque todo lo que sube, tiene que bajar .

Si nos mantenemos en la observación, de cómo nos comportamos, de cómo nos sentimos, nos daremos cuenta de que en cualquier acto que realizamos, estamos escogiendo la polaridad, la dualidad, y poder reconócerlo es un paso importante para elegir de nuevo, y ver si realmente queremos relacionarnos desde la Unidad o queremos seguir experimentando las polaridades que es la consecuencia de elegir la dualidad, el ego, la separación, la ilusión, el miedo.

Si nos observamos en un caso práctico y muy habitual, que se da mucho en los cursos de tantra que hacemos, donde experimentamos muchos abrazos, con nuestros compañeros, es una oportunidad para observar la polaridad, si me siento más atraído de abrazar al sexo contrario, con un cuerpo bonito, y me mantengo observando cómo muchas veces mi personaje tiende a esta tendencia, puedo observar la polarización que está ocurriendo y entonces una vez observada, puedo elegir si me quiero dejar llevar por ella o realmente quiero deshacerla, que es el camino que propongo, deshacer las polaridades, cada vez más y reconocer que ahí reside la verdadera Libertad.

El camino es dejar de poner el foco en las cosas del mundo y los deseos de tu personaje, y desear sobre todas las cosas tu paz interior y el reconocimiento del Amor que somos.

Estás dispuesto a soltar todos tus deseos del mundo?

Y a observar donde te percibes con más polaridad?

Te invito a que hagas este proceso , es un camino muy lindo , y eso no significa que tengamos que renunciar a los placeres del mundo, por el contrario te llegarán de forma natural sin tu tener que buscarlos.

“ Desea La Paz De Dios sobre todas las cosas y todo lo demás vendrá por añadidura.“

Esto es la verdadera liberación.

 

Laura Cárcel

 

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