Tanto el dolor como el placer son dos polaridades que según cómo las vivas te llevan de camino a despertar o te mantienen preso en el sueño. La experiencia humana es una danza que oscila entre el placer y el dolor.
Cuando hacemos una interpretación personal, valorando una situación, como placentera o dolorosa, deja de haber espacio para la paz, porque estamos poniendo la atención en las polaridades que la experiencia dual nos ofrece continuamente, y estamos elaborando una interpretación sobre lo que percibimos, sentimos y experimentamos, si nos dejamos llevar por esas interpretaciones que están sucediendo en la mente del ego, siempre estaremos oscilando entre el placer y el dolor, en todas sus expresiones e intensidades.
Elegir despertar es ser consciente y estar en la práctica de observar todos los pensamientos y las percepciones como neutras, ningún pensamiento ni ninguna actividad, experiencia, encuentro, vivencia… etc. tiene el poder de afectar mi estado de paz, solo cuando hay una interpretación positiva o negativa, entonces es cuando empiezo a sentir placer o dolor. Cuando dejamos de evaluar todo lo que experimentamos, observando que solo son percepciones, percibo a través de los ojos, de los sentidos, de la escucha… todo son percepciones y son totalmente neutras, la única forma de permanecer en estado de paz infinita es darse cuenta de que “No se cual es el significado de nada de lo que percibo” me abro sentir la energía, la sensación, que surge en cada momento, sin atribuirle ninguna causa y ninguna interpretación, abrazando y aceptando lo que hay, esa es la clave, para sentir la profunda dicha.
Si la finalidad es despertar utilizo tanto el dolor como el placer para recordar quien Soy, haciéndome consciente de que si me dejo llevar por lo que mis sentidos me ofrecen siempre estaré bailando entre estas dos polaridades. Y si me mantengo buscando placer estaré igualmente distraído por las cosas que el mundo me puede ofrecer, serán momentos placenteros, y me mantendrán distraída para no conectar con la paz interna, con la verdadera felicidad, que solo se puede experimentar cuando estoy abriéndome a sentir ahora, todas las sensaciones internas, sin juzgarlas, sensibilizándome con la energía interior y soltando todas las interpretaciones, abrazando todas las sensaciones, cuando me abro a sentir el dolor, justo en esa acción de abrazar, atender y estar presente en ese dolor ahí esta la paz, porque no hay lucha, no hay resistencia, hay presencia con lo que hay, y te das cuenta de que no viene de nada externo, es solo lo que surge al elaborar una interpretación que viene del ego, y la única causa de estar sintiendo dolor es porque me he dejado guiar por el ego, al darle atención a mis interpretaciones, valoraciones, juicios.
Elegir despertar es observar como tu personaje se está viviendo, en cada momento, si verdaderamente hay un espacio para abrirte a sentir y soltar todas las interpretaciones , valoraciones, practicando el discernimiento, y soltando el ego, o hay una continua búsqueda de placer en cosas del mundo, y un miedo profundo a sentir dolor, soledad, vulnerabilidad… identificación con el ego.
Elegir despertar es darse cuanta de que tu personaje está siendo soñado, y que en realidad solo responde al sueño, no tiene capacidad de decidir, y que la única elección se hace en la mente, y continuamente estás eligiendo dejarte guiar por el ego. El ego lo defino como un sistema de pensamiento de victimismo, juicio, dolor, es la voz que siempre esta hablando, pero no es real, es solo una ilusión. El ego te hace creer que eres una identidad propia, separada , con una voluntad propia capaz de decidir, cómo si el personaje de un sueño fuera capaz de hacer o deshacer cosas , el personaje de un sueño solo responde al guión del soñador y por si solo no tiene voluntad propia, está siendo soñado.
Elegir despertar es elegir de nuevo, ( el que elige no soy yo como Laura, sino la mente o conciencia, que esta soñando a Laura, Laura solo es el ego, que está siendo soñado) y elijo dejarme guiar por el Amor (el Amor es el guía interno que te recuerda que tu no eres el personaje, que te guía a despertar de este sueño, soltando toda la identificación, para poder reconocerte en lo que realmente eres, Amor infinito, un estado de Paz imperturbable, no eres un cuerpo, eres libre, te guía de forma amorosa en cada momento, pero solo puedes escucharlo cuando se acalla la voz del ego, te conduce poco a poco a que sueltes todas tus creencias, tus historias, tus pensamientos, tu identificación con tu personaje y su historia, te guía a despertar porque en realidad esta experiencia dual, es un sueño, no es real, porque la dualidad no existe, solo es una creencia, la palabra lo dice “viene de creer…” no es tu realidad, pero las creencias tienen el poder de manifestar tu realidad, por eso lo que estas manifestando parece tan real, ahora tu decides, si eliges seguir durmiendo y distraído por las polaridades, o eliges despertar.
Elegir despertar es estar en la práctica constante de renovar cada momento, cada instante esta decisión, la elección de ser guiado por el Amor, para recordar Quien Soy, abriéndome a sentir, a través de mi personaje, para poder darme cuenta de que lo que está sientiendo Laura en cada momento, es consecuencia de con que sistema de pensamiento se está dejando guiar, observo el sentir, cualquier sensación de intranquilidad, por sutil que sea, impaciencia, estrés, dolor, es por que me he dejado guiar por el ego, puedo elegir de nuevo, entrego todo esto que estoy sintiendo, soltando todas las interpretaciones, no se por que me siento asi, no hay causas en el mundo, la única causa es que hice una elección errónea en mi mente, decidí que fuera el ego quien me guiara, pero ahora puedo elegir de nuevo, elijo al Amor, para que sea mi guía ahora, y deshaga todas las consecuencias de mi elección errónea, y de esta manera se va deshaciendo el ego, el sistema de pensamiento que te lleva al sufrimiento, para ser restaurado por la Verdad, y observo como Laura siente la verdadera Paz que no es de este mundo, cada vez mas asentada.
Laura Cárcel